Autoridades
Presentes
Señor
Director y cuerpo docente
Estimados
Padres y Apoderados
Queridos compañeros:
Para
mí es un honor representarlos en esta trascendental ceremonia que marcará un
hito en la vida de cada uno de nosotros. Con tal convicción, responderé a la confianza que se me ha dado,
expresando mis sentimientos con emoción,
alegría y profunda sinceridad.
Hoy
finalizamos un proceso de maduración, de grandes logros como personas y
principalmente como alumnos de este establecimiento educacional.
Una
etapa que comenzó hace 4 años o más para otros; una etapa en que vivimos
grandes experiencias y momentos juntos, que simplemente quedarán plasmados en
nuestra memoria; alegrías, tristezas, citaciones de apoderado, suspensiones,
cimarras, etc…., vivencias que sin duda
marcarán nuestra etapa escolar.
Tropezamos,
cometimos errores, pero siempre con la frente en alto nos apoyamos mutuamente y
nos levantamos; siempre logrando sacar una lección acerca de nuestras derrotas,
y sintiéndonos orgullosos tras nuestros éxitos. Recuerdo que a pesar de los errores y algunos malos
momentos, nunca nos dimos por vencidos.
Confieso
cierta nostalgia porque nuestras voces y nuestras risas no se volverán a oír en
estos pasillos que tantas veces recorrimos; pero con una inmensa
felicidad, porque hoy tras largos 4 años, todos nuestros esfuerzos rinden sus frutos.
En
este punto, es hora de despedirnos y agradecer a todos aquellos que siempre
estuvieron con la máxima paciencia y cariño hacia nosotros, aconsejándonos,
educándonos, entregándonos sabiduría, enseñándonos a ver la realidad de la vida y guiándonos para ser mejores personas, individuos
racionales pero a la vez sensibles.
Hoy
nuestras vidas se separan; muchos partirán a la educación superior, otros al
ámbito laboral. Quiero decirles, que vayan donde vayan, sea cual sea el camino que ustedes sigan, mi deseo es que
tengan un futuro exitoso, pleno de amor y armonía; y nunca olviden que para recorrer esos caminos
debemos tener sueños, anhelos que con
trabajo y perseverancia, podemos
transformarlos en metas cumplidas, en hechos reales y concretos.
Tal
como dice el famoso creador de dibujos animados “Walt Disney”, “todo empieza
con un sueño. Suéñalo y podrás lograrlo”.
Enfrentemos
el mundo con una actitud positiva, confiando en Dios, pero por sobre todo
confiando en nosotros mismos, y en nuestras propias capacidades. Si algún día nos
equivocamos, que ese mal paso no sea un impedimento para seguir adelante, pues
“es legítimo equivocarse, porque en tanto así sea, puede corregirse”. Por eso, nunca dejen de luchar por sus sueños para que
se hagan realidad y tengan una vida
colmada de felicidad y sabiduría[1] .
Para terminar cito
una de las frases de Colin Powell que dice:
“No hay secretos para el éxito. Éste se alcanza preparándose,
trabajando arduamente y aprendiendo del fracaso.”
Agradecido por todo y de todos,
muchas gracias y hasta siempre.
Juan Pablo Hernández
4° HC
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